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“Aquí estoy porque me has llamado”. Taller de oración

En la tarde del miércoles 8 de mayo los profesores de reciente incorporación a Fundación Victoria y animadores de grupos SMV, realizaron un Taller de Oración en la Capilla del Seminario.

El taller estuvo dirigido por el sacerdote Ángel Antonio. Éste comenzó con un precioso cuento “del indio y del águila” que sirvió de introducción para decirnos que Dios cree en nosotros, Él ama el primero y nunca desespera por nosotros. Ángel Antonio nos comentó que nuestro mejor sueño es vivir como Dios nos sueña, porque nos conoce mejor, porque no está condicionado por nuestros miedos, complejos o introyectos. Su mirada alcanza nuestro interior y nuestra historia. Su presencia nos envuelve y nos habita.

A través de la Historia de Samuel (1 Sam3, 1-10) nos explicó la importancia de sentir la presencia de Dios y de escuchar su Palabra. Nos explicó que hay que entender la oración como un proceso: desde la oración vocal hasta la contemplación.

Trabajamos los 4 pasos para orar:

  • Entra. Trae aquí todos tus sentidos. Ven aquí con todo lo que eres. Recógete. Entra por la orilla del afecto.
  • Permanece. Ir tomando conciencia de “Dónde” estamos y ante Quien.
  • Danza. Es el contenido propio de la oración: hablar y escuchar, meditar la vida y la palabra. Contemplar sus misterios. Entender su modo de vivir. Ora, medita, acalla, llora, contempla. En la oración se entra como en una batalla y se permanece como en una danza.
  • Exponte. La oración no se hace, te hace.

Por ultimo nos explicó que para enseñar a orar a nuestros alumnos , como educadores cristianos, hay que cuidar el espacio, que no debemos tener prisas, hay que orar con el cuerpo (las posturas ayudan), que es importante la respiración, que debemos despertar (en nuestros alumnos y en nosotros mismos) los sentidos externos e internos y que es muy importante la constancia, los signos,  las imágenes y la música. Como conclusión Ángel Antonio hizo hincapié en que todo puede ser llevado a la oración: lo ordinario, lo extraordinario, acontecimientos, sucesos, rotos y esperanzas de nuestro mundo y nos animó a entrenarnos y entrenar a los alumnos en la oración.

Desde Fundación Victoria queremos agradecer a Ángel Antonio su disposición para enseñarnos tantas cosas a través de este pequeño Taller de Oración.

Sin duda nos quedamos con lo importante:

“Aquí estoy, porque me has llamado”  “Habla, Señor, que tu siervo escucha”