
Guillermo Alzugaray, piloto: «En San Patricio aprendí la perseverancia y el trabajo duro»
A pesar de su juventud, tan sólo 24 años, Guillermo Alzugaray lleva 4 volando; y año y medio como primer oficial de un Boeing 737 de la serie 800, en una conocida compañía aérea irlandesa.
Llegar hasta aquí «ha sido un camino duro, plagado de obstáculos», señala, y parte de este éxito se debe sin duda a la formación que recibió desde pequeño en el colegio San Patricio. «Empecé con tan solo 6 años, en primero de Primaria, y quizá en el aspecto en el que San Patricio más contribuyó en mi formación fue en la transmisión de sus valores: la perseverancia y el trabajo duro, el exigirte cada día un poco más para que desarrolles todo tu potencial y demuestres hasta donde eres capaz de llegar».
Y es que, apunta, «aunque para ser piloto de línea aérea no hace falta tener carrera universitaria, yo me decidí por estudiar la de Gestión Aeronáutica para aumentar así tanto mis conocimientos como mi curriculum. Fueron unos años duros en los que combinaba los vuelos y simuladores por la mañana en la escuela de vuelo y las clases de la universidad por la tarde». Una capacidad de trabajo y una autoexigencia aprendidos en San Patricio y en la que realiza una «mención especial a Ángeles Jiménez, la actual directora, que fue mi tutora en 3º y 4º de Primaria. Sin lugar a dudas, una buena base es el pilar fundamental que después sustentará toda la formación que un individuo recibirá a lo largo de su vida. Es por ello que seleccionar un buen centro es una tarea fundamental».
San Patricio sigue buscando la excelencia educativa y ha incorporado recientemente la educación bilingüe. Para Alzugaray, este aspecto viene a aumentar aún más la competitividad de los alumnos de San Patricio con respecto a los de otros centros: «el inglés hoy en día es un elemento esencial en nuestras vidas, tanto en cosas cotidianas, como navegar por internet, como para conseguir un puesto de trabajo, ya casi no importa de qué. Definitivamente, dentro de unos años, un niño que haya asistido a un colegio bilingüe marcará diferencia con respecto a uno que no lo haya hecho».